Jesús Limens, estudiante de doctorado de UMH: “Cualquier persona merece un tipo de educación o instrucción en neuroética de este estilo”
12 septiembre 2025
Cuando la ciencia, la tecnología y las humanidades se encuentran, surgen debates éticos y morales sobre hasta dónde podemos llegar y hasta dónde deberíamos llegar con los avances científicos y tecnológicos. A estas y otras cuestiones se ha enfrentado Jesús Limens, estudiante del Programa de Doctorado en Neurociencias, en la Escuela de Verano que ha tenido lugar en la Universidad de Bonn con el título Trust me! Neural Networks, Manipulation, and Ethics.
Limens es un doctorando que viene del mundo de la física y ahora investiga en el área de la neuromodulación mediante ultrasonido y la estimulación cerebral no invasiva. Un área de investigación en que los dilemas éticos y morales están al alza.
Jesús, ¿por qué decidiste solicitar la plaza para asistir a esta Escuela de Verano en Bonn?
R: Principalmente porque me pareció que trataba un tema que aquí no trabajamos mucho. Y al final, de manera directa o indirecta, todo desarrollo o avance que se hace en la ciencia tiene una implicación en algún paciente y, si queremos ser correctos y éticos, hay ciertos dilemas que nos tenemos que plantear con tiempo.
¿Crees que la escuela de verano ha cumplido con tus expectativas?
R: Sí, sobradamente. Sobre todo, porque yo nunca me había enfrentado a ciertos temas de los que se hablaron. Ni me los habría planteado. Además, casi todos los asistentes eran estudiantes de la rama de humanidades y fue muy interesante darme cuenta de cosas que vemos muy lejanas, pero que realmente están ahí.
Por ejemplo, hubo tres charlas que giraron en torno a la manipulación, qué es, cómo se define, cómo puede producirse, etc. Al principio, parece un tema aislado, introductorio quizá, pero luego viene lo importante: si se comercializa cascos que estimulan el cerebro para ayudarte, por ejemplo, a dormir, a ser más creativo o a decidir qué camino seguir para llegar a de un punto a otro, ¿qué pasa cuando tú tienes monitoreada la actividad cerebral de una población, además de su ubicación y todo? Que quien controla esos datos tiene toda tu información, no tus cookies, sino tu manera de ser a su disposición. Ahí el riesgo de una manipulación masiva es mucho más alto.
Has hablado de manipulación como uno de los riesgos de ciertos avances tecnológicos, ¿se trataron otros durante la escuela de verano?
R: Sí. También se habló de la discriminación que puede provocar el tener o no acceso a estos recursos que se desarrollan y, a su vez, la brecha de recursos entre quienes pueden permitírselos y quienes no. Es decir, primero está el hecho de que uno lo tiene y el otro no, pero después, además, está el hecho de lo que puede hacer quien lo tiene, que el que no lo tiene no puede hacer.
Y, tras plantearos este tipo de dilemas éticos y morales, ¿llegasteis en algún momento a algún tipo de conclusión?
R: Una conclusión como tal, no. Pero sí que diría que nos fuimos con una opinión común, es que hay muchas oportunidades con esta tecnología, pero mucha gente allí se cuestionaba si sobre la necesidad de algunos de estos avances.
Como persona que se dedica a la neuromodulación sináptica, creo que potenciar la neurotecnología no es un problema. Pero debe por un bien de interés público, aunque la empresa pública también suponga un riesgo.
Jesús, todos estos debates y temas, ¿cómo se trabajaron?
R: Todos los días tuvieron una estructura similar, por las mañanas teníamos hasta tres charlas relacionadas con la inteligencia artificial, la neurotecnología y sobre dilemas éticos y filosóficos. Sin embargo, una de las cosas que más destacaría de las charlas son las rondas de preguntas. Siempre preguntaba mucha gente y hasta las charlas menos interesantes acababan siendo muy activas.
Después teníamos trabajos en grupo. De hecho, la representación teatral que te comentaba forma parte de una actividad que llamaron el ‘Ideathon’, en que cada grupo debía plantear los dilemas éticos y morales relacionados con un dispositivo neurotecnológico innovador.
Finalmente, ¿crees que este tipo de actividades o formaciones son necesarias?
R: Completamente. Creo que este tipo de actividades tratan una parte de la ciencia a la que no nos enfrentamos del todo. Además, considero que cualquier persona merece y debe… fíjate, prefiero la palabra merecer, un tipo de educación o instrucción ética de este estilo. Recomiendo y animo a la gente a formarse y aprender de neuroética.



